EVALUACIÓN DEL ACCIDENTADO
Se denomina así al reconocimiento del accidentado, en el lugar de los
hechos, enfocado a detectar lesiones o situaciones potencialmente
peligrosas para su vida.
Es necesario que la actuación sea sistemática y secuencial. Se debe
seguir escrupulosamente el procedimiento descrito a continuación,
sin pasar al siguiente escalón antes de haber completado el anterior.
1a FASE: EVALUACIÓN PRIMARIA.
Identificación de situaciones que puedan suponer una amenaza
inmediata para la vida de la persona. Siempre por este orden:
- 1o Valorar la consciencia (si está consciente, podemos suponer que respira y que el sistema circulatorio funciona): responde o no a estímulos
- 2a Valorar la respiración (si respira, podemos suponer que su corazón late): si falta, intentar restablecerla, Reanimación Cardiopulmonar (R.C.P.)
2a FASE: EVALUACIÓN SECUNDARIA.
Tras asegurar las funciones vitales, debemos tratar de detectar
otras posibles lesiones. Para ello realizaremos una exploración
detallada y sistemática desde la cabeza hasta las extremidades,
buscando heridas, fracturas, hemorragias, quemaduras, movimientos
torácicos anormales, etc. para poder aplicar los cuidados necesarios.